Ensayos de autores argentinos contemporáneos
A: Luis Alberto Spinetta
Los delirios del artista se vienen declarando desde el horizonte, las penumbras del silencio se aproximan en el pensamiento latente, ¿qué existe más allá? la muerte, el deseo, la soledad y las palabras que acompañan al fantasma alterado a caminar sobre la escena de un texto profundo.
Artaud es un espíritu que va desde el cielo al infierno. Gritando desde la pequeña habitación de Rodez: merde‑mort‑dieu. Salta también por las neuronas del doctor Ferdiere, por los cabellos del doctor Latremoliere, ¿qué más?... cae la noche. El opio, la morfina y el electroshock son varios puntos que giran entre tantas agujas voladoras, en millones de voces alteradas, donde el eco programado para los oídos en una guerra, que junto a las bombas y al encierro, explotan al unísono en Europa.
Qué otro poeta podría vomitar estas palabras, luego de permanecer encerrado durante varios años en distintos asilos de Francia. De modo que para una mente lúcida como la de Artaud la vida provoca una serie de circunstancias para que el hombre luche. Así el poeta grita y dice: "Los asilos de alienados son receptáculos de magia negra conscientes y premeditados, y no se trata solamente de que los médicos favorezcan la magia por medio de terapéuticas intempestivas e híbridas sino que la ejercen. Si no hubiera habido médicos, jamás habría habido enfermos, ni esqueletos de muertos, ni enfermos para desollar y despellejar, porque es con los médicos y no con los enfermos que la sociedad comenzó...". Este poema es extenso y se llama Alienación y Magia Negra, fue escrito entre julio y septiembre de 1946. Pertenece al libro: Artaud el momo.
El surrealismo es una palabra que cae y destroza una generación de artistas. Nace de la misma necesidad de gritar hacia una Europa decadente, se podría decir que nace para movilizar ideas y destruir las manos impulsadas por el espíritu palabreado. Desde aquel famoso y revolucionario manifiesto surrealista (dirigido por André Bretón) Artaud entra en contacto con el fuego, entra para cortar una página de las siguientes aperturas cerebrales. La fortaleza que oculta bajo su cabellera, el poeta‑negro corrompe, acaba y agita a varios artistas. Algunos dirán que esta loco, otros prolongarán la distancia de un hecho cultural‑pesado, a la imagen de un ser fuera del contexto social, y el resto tendrá la magia para compartir las emociones y el vuelo de un artista en actividad.
Basta dejar escapar una motivación para que el surrealismo golpee nuestras articulaciones. Lo apreciamos en la pintura de Max Ernst, en la dupla Bunuel‑Dali, en la poesía de Artaud etc. Los artistas se agitaban en un mundo tan real, que las alucinaciones iban in‑crescendo, convirtiéndolo todo en un desorden de las cosas, un vuelco enorme, sopesando el caos con la pasividad.
La traducción del surrealismo puede ser la siguiente: "Los sonidos penetran en el vacío del niño‑árbol, del verdugo‑activo, de la parca detrás nuestro. Los cuerpos se balancean en el ojo flotante, la luz recibe un pacto. La luz es un movimiento en el oscuro cuerpo del poeta y en las lágrimas de su ventana irreal. En el día de las fuerzas etéreas... en el día de la vida. Así como toda palabra cae en el olvido, también cae la mente succionada por el grito que tortura a la soledad. Cae y se destroza en mil pedazos, cuelga del espíritu de la mano deseada por la mente. Así la palabra vuela en nuestra vida. Por la misma fuerza que atormenta y deprime al artista, suicidios y suicidios sonríen, no por la misma risa que oímos, sino por el sabor dulce de la muerte.
EL ACTOR Y EL DESTINO
Como todos sabemos Artaud fue un hombre de teatro, esto quiere decir que fue actor, director de escena y que estuvo activo en casi todos los teatros franceses de la época. Sabemos que vivió en los teatros, o sea que durmió en los mismos. Podríamos mencionar algunas de las obras, como así también los roles. Debuta como diseñador de vestuario en: Les Olives de Lope de Rueda; es el Rey Moro en Moriana et Galvan de Alexandre Arnoux; Giresias El Adivino en Antigona de Jean Coctaeu, etc. Trabajo en los siguientes teatros: L'Oeuvre, Le Vieux Colombier, La Comedia de Los Campos Eliseos, El Teatro Pigalle, El Teatro de Follies‑Wagram, y compartió escenario con: Lugne, Falconetti (y una mujer que lo marcara y lo llevara al pico máximo del delirio) Génica Athanasiou. Cabe afirmar que el espíritu que se encuentra apoyado en esta figura, es un fantasma en la escena transportada al destino. Así la rebelión de una mente alterada, provoca una reacción en el publico y en el ambiente artístico, una revolución orgánica bajo los efectos de un guión adaptado de un relato netamente literario.
Artaud vuelca una serie de imágenes en la realidad teatral. Pone de manifiesto las preocupaciones de la vida teatral, para que no pierda su magia y termine en el vacío suspendido por un hilo, que frecuentemente sera el conductor de arrastrar a los actores hacia la depresión. También trabaja en cine. En 1922 hace un papel en Mater Dolorosa de Abel Gance, después bajo la dirección del mismo será Marat en Napoleón, en La passion de Jeanne D'Arce hará del Monje Massien del famoso director danés Carl Dreyer, con la destacada actriz Falconetti en el papel de Juana de Arco.
En 1927 crea con el actor Roger Vitrac el Teatro Alfred Jarry, un laboratorio de ideas en donde las escenas pasan a un plano oblicuo. Cabe mencionar la palabra psicodelia para rellenar las observaciones de los actores y del público. El 5 de enero de 1929, Artaud pone en escena la obra de Roger Vitrac "Victor Ou Les Enfants Au Pouvoir". Después el teatro Alfred Jarry se desintegrara, las dificultades para seguir apoyandolo económicamente arrasan, a todo esto las críticas y los medios de comunicación tampoco le son favorables. Ese mismo año publica un libro que titula "L'Art et La Mort" donde dice: "Tu estabas muerto y he aquí que te encuentras nuevamente vivo, solo que esta vez estas solo. En 1938 aparecen una serie de ensayos bajo el titulo "Le Theatre et son Double" donde expone sus ideas y conclusiones del arte que lo convertirá en un maestro de la escena metafísica. Uno de los puntos del libro tiene como titulo: El Teatro de la Crueldad, donde se manifiesta el concepto estético y filosófico. Leemos: "El teatro ha de ser igual a la vida, no a la vida individual (ese espectáculo individual de la vida donde triunfan los caracteres) sino a una especie de vida liberada, que elimine la individualidad humana, donde el hombre no es nada mas que un reflejo. El teatro de la crueldad ha sido creado para devolver al teatro una concepción de la vida apasionada y convulsiva; y en ese sentido de violento rigor, de extrema condensación de los elemento escénicos, ha de entenderse la crueldad de ese teatro.
DESCRIPCIÓN DE UN POETA TORTURADO
Tocar el abismo entero, completo, es haber acariciado el fuego entre las lineas de la muerte. Hay un cuello enorme capaz de rebotar en el espacio y chocar otra vez en el alma, Artaud en 1925 es la explosión de las letras, envuelve con sutileza el pensamiento de la intelectualidad a su alrededor, por qué no dejarlo actuar?
El crear constantemente versos no es nada más que una liberación gigantesca, es: LA LIBERACIÓN. Una verdad que destruye el círculo surrealista parisino. Artaud estaba loco, y su locura fue multiplicándose hasta la actualidad, hasta quebrar la alienación con la vida. Un grito desgarrador abre la página en la poesía, podríamos decir: que muchos enloquecieron de su espíritu. Un poeta llevado con los ojos vendados al subsuelo, una sensación de sentir los cuchillos afilandose a lo lejos, un flotar de poetas se deslizan por el río. Artaud es envuelto en una bolsa de nylon, es expuesto en una fiesta ácida. Su cabeza es atropellada por varios de sus colegas que hacen fila a su alrededor. El dolor ya no sube por su cuerpo, sus miembros se doblan hasta el amanecer. Si la tierra gime a su alrededor, es para darle sabor a su sexo, a sus articulaciones, o sea a su cuerpito. El pensamiento característico del poeta no puede arrastrarse eternamente, es obligado a ejercer distintas posiciones carentes de afectos. Un juego que lo lleva a contraponerse a Bretón y sus amistades, hacia el centro mismo de la vida, esa vida que tanto duele al ser inyectado por todos los orificios del mundo, por todos los huecos putrefactos que obligan a reivindicar la injusticia y el odio a los pensadores en actividad. Un poeta equilibrado no existe, pero no hay que electrocutar su espíritu, señalándolo por todos lados, manipularlo, estirar un órgano en un recipiente. Morder sus poemas y su corazón es un mismo dolor. Artaud representó un peligro para los europeos, más precisamente para los franceses. La pureza en estos casos que hay en el mundo, tenemos que mantenerla a muerte.
VAN GOGH: RETRATO DE UN IMPRESIONISTA CACHORRO
"Pues no hay nada que derrumbe la cosmografía, la demografía, de los eclipses, de los equinoccios y de las estaciones como una pintura de Van Gogh ". Carta a A. Bretón 28/02/1947.
Vincent Van Gogh, un delicado pintor que fuera también escritor en sus Cartas a Theo, un artista gigantesco, un creador que revelando sus cuadros, fuera estudiado y apreciado por Artaud en un ensayo titulado: "Van Gogh, el suicidado por la sociedad". La desidia, la tristeza se expresan en una carta enviada a su hermano Theo el 23 de julio de 1890, dice Van Gogh "...queria escribirte muchas cosas, pero ya no tengo voluntad, pues siento que es inútil...". El universo pintado por Van Gogh tiene un alma gemela, tiene un hermano que no fue Theo, sino Artaud. El estallido que revienta en el poeta, gira en un esbozo dado por el pintor en los rostros que dibuja y pinta. Esas personas sufriendo, trabajando, la fusión paralela a su encierro; pero todo el dolor que Artaud siente puede ser reflejado en los cuadros de Van Gogh. En todas las obras hay un profundo color que gira en los autorretratos como en las puestas de sol. La angustia corre desesperadamente por las telas, existe un violento rechazo contra la depresión y la soledad. El corte de la oreja en Van Gogh es el corte de la existencia en Artaud. El desideratum del poeta era la comprensión, una palabra que deambula y no quiere digerirse, como si no pudiese concebir al otro, así como Van Gogh no era comprendido, así se busco en los abismos para delinear las cordura que corre como las llamas hasta el centro del fuego mismo. Artaud‑Van Gogh, los oscuros, como dijeran algunos críticos. Decía el poeta francés Pierre Reverdy : Soy oscuro como el sentimiento.
En 1947 publica el ensayo Van Gogh el suicidado por la sociedad . Que cae como un yunque sobre todos. Cada pensamiento opuesto a la legitimidad de las cosas carece de valor para emprender una idea, un logro en la vida, tanto individual como social, todo lo que posee ese pensamiento es nimio. Los críticos a veces rompen con la realidad y de sus cabezas emergen diferentes realidades y mentiras que vuelan en sus contornos como un escudo protector. Pero la vida de Artaud como la de Van Gogh, donde el espíritu es arrancado lisa y llanamente sin objeción alguna es la lucha para sobrevivir a la materia. A Van Gogh lo tortura su hermano Theo, a Artaud los médicos, el primero sufre el suplicio dado por el Dr. Gachet; al poeta algunos que se dicen surrealistas. No olvidemos que el ensayo sobre Van Gogh fue escrito en la clínica psiquiátrica de Rodez. Entonces, si la frase de Francis Ponge: El hombre esta por llegar. El hombre es el futuro del hombre. Tiene por consigna elevar nuestros corazones, nuestros espíritus, no rompamos la bolsa de escroto para sangrar por las calles apestadas de odio y locura.
Van Gogh, el suicidado por la sociedad, es quizás el mejor ensayo que se haya escrito sobre el pintor impresionista, corroboremos lo expuesto en palabras de Artaud: "...Esos cuervos pintados dos días antes de su muerte, no le abrieron a Van Gogh, como tampoco sus otras telas, la puerta de cierta gloria póstuma; pero a través de la puerta, por él abierta, de un enigmático y triste más allá, abren a la pintura pintada, o mejor dicho a la naturaleza no pintada, la puerta oculta de un más allá posible, de una posible realidad permanente. No es común ver a un hombre, que lleva en el vientre el tiro que lo mata, poner en una tela cuervos negros sobre una especie de llanura quizá lívida, vacía en todo caso, en la que el color borra de vino de la tierra se enfrenta desesperadamente con el amarillo sucio de los trigales". Artaud lleva en el vientre la exaltación en palabras que lo matan. Los mismos cuervos son poseídos por el hombre para aumentar el caos en su pensamiento frágil, envuelto, hecho carne en el mundo para el vuelo de un ángel donde la ambigüedad siempre estuvo en su obra.
"Si me mato, no será para destruirme, sino para reconstruirme(...) Por el suicidio, reintroduzco mi designio en la naturaleza(...) Me libero de ese condicionamiento de mis órganos tan mal ajustados con mi yo (...) Ha dispuesto de mí hasta el absurdo, este Dios, me ha mantenido vivo en un vacío de negaciones, de renegaciones encarnizadas de mí mismo, ha destruido en mi hasta los minimos empujes de vida pensante, de vida sentida. Me he reducido a ser como un autómata que anda, pero un autómata que siente la ruptura de su inconsciencia (...) Ciertamente estoy muerto desde hace tiempo, ya estoy suicidado. Me han suicidado.
CAÍDA Y DESTRUCCIÓN
Posiblemente la mística de Artaud tenga un peso relativamente Heavy. Cuando emprende el viaje a México (en el año 1936) una fuente de energía reacciona en un país donde la palabra surrealismo está creciendo entre los intelectuales, digamos que esta emergiendo de las cabezas parlantes. Hay una necesidad enorme de reventar el surrealismo, y Aratud entra en contacto con los sedientos de las letras. Se propone dar una serie de conferencias y es invitado a realizarlas en el anfiteatro Bolívar de la escuela nacional preparatoria, los días 26, 27 29 de febrero de 1936. Las charlas se publican en el famoso periódico mexicano El Nacional. En estas conferencias Artaud habla del surrealismo, del teatro y de su desvinculación con la política que los surrealistas habían incorporado en Francia. Propone a los intelectuales mexicanos que no copien el modelo francés, ya que el mundo europeo tiene una política tan materialista, que una tierra como la de México terriblemente marcada por un espíritu guerrero, debe negarse a caer en un plano netamente chato e imperceptible. Pero el propósito de Artaud es entrar, conocer y participar en los rituales de los indios Tarahumaras, y lo logra. Se produce la apertura alucinante del poeta, la relación y el contacto con la naturaleza provoca una serie de emociones y experiencias donde la idea de conservar una cultura latente como la de las fuerzas ocultas indígenas se nos presenta como las iluminaciones eternas del destino. Publica el libro: Viaje al país de los Tarahumaras. Lo cierto es que al convivir con los indios, se limpiara para siempre. Artaud es llevado a su regreso de México, como un ser poseído a Irlanda, con motivo de entregar un báculo que según él pertenece a San Patricio, pertenece a los irlandeses. La policía inglesa lo detiene y lo encierra, lo entrega a las autoridades francesas bajo una resistencia terrible del poeta. Por supuesto los franceses también lo encierran y el diagnóstico es: alienación. Es encerrado en distintos manicomios. Luego es llevado a una clínica de Rodez, desde donde se comunica con sus amigos (los pocos que lo acompañan) y donde se reúnen en tres tomos las famosas "Cartas de Rodez". Permanece durante siete u ocho años hasta que le permiten abandonar la clínica. A su regreso a París se conecta con sus colegas, parece un cadáver. Se cumple otro ciclo, un período totalmente negro.
Antonin Artaud falleció en Ivry‑Sur‑Seine (París) de cáncer anal, lo hallaron tirado al lado de su cama el cuatro de marzo de 1948.
Ese desafío de pensar sin restricciones